Conclusiones. Es indudable la importancia teórica y clínica que sigue aportando la teoría del apego en el ámbito de la salud mental. Ha ayudado a comprender, un poco más, la génesis de ciertas conductas desadaptativas, disfuncionales o patógenas en sujetos que han vivido en un clima familiar inseguro o desorganizado. Donde sus progenitores o cuidadores no han tenido recursos afectivos, emocionales y comunicativos para con el niño. Hemos comprobado a lo largo del TFG que estos recursos bien atendidos por parte de los cuidadores son fundamentales para dar un soporte de seguridad que haga desarrollar una personalidad que sea capaz de afrontar con éxito las exigencias psicológicas, afectivas y conductuales del sujeto. El apego es un continuo que va evolucionando a lo largo de la vida de cada persona, y los primeros patrones que son adquiridos en edades tempranas, serán los únicos recursos que pueda desplegar el niño y adolescente en su relación social, íntima y familiar. Al menos